El alcohol isopropílico, también llamado isopropanol o propan-2-ol (nombre IUPAC), y comúnmente conocido como IPA, es un alcohol incoloro, inflamable, con un olor característico e intenso y soluble en agua en todas proporciones. Es uno de los miembros más comunes de la familia de los alcoholes. Fue el primer alcohol sintético comercial (1920).

Su síntesis se realiza fundamentalmente a partir de la reacción del propileno con ácido sulfúrico, seguida de una hidrólisis.

La producción mundial de isopropanol es de 2,1×106 Tm, los mayores productores de IPA son USA, Europa Occidental y Japón, respectivamente.

Algunas de sus propiedades físicas son las siguientes:

  • Densidad: 0,79 g/cm3 (a 20ºC)
  • Presión de vapor: 44,0-60,2 hPa (a 20-25ºC)
  • Punto de fusión/congelación: -89,5- -88,5ºC
  • Punto de ebullición: 82,3-82,5ºC (a 101,3-101,325 kPa)
  • Punto de inflamabilidad: 11,7-12,0 ºC
  • Autoinflamabilidad: 399-455,6 ºC
  • Viscosidad dinámica: 0,576-4,619 mPa*s

Al ser un producto altamente inflamable e irritante requiere mucha precaución durante su manipulación.

Como medidas de prevención habrá que:

  • Realizar conexión a tierra del recipiente y el equipo receptor, para evitar descargas estáticas.
  • Mantener alejado de calor, chispas, llamas abiertas y/o superficies calientes.
  • No fumar; utilizar sólo al aire libre o en un área bien ventilada.
  • Utilizar equipos a prueba de explosivos y herramientas que no produzcan chispas.
  • Llevar guantes y/o ropa de protección, así como protección de ojos y/o cara.

El IPA es utilizado para un amplio abanico de aplicaciones, entre las que destaca como disolvente en la industria metalúrgica y como agente limpiador. Es por esta última aplicación que ha sido el producto estrella durante la pandemia para la fabricación de productos de higiene y desinfección.

Para saber más sobre esta sustancia pueden solicitarnos información en www.arbisa.es